25 de abril de 2010

Nada es por casualidad


Gracias, porque contigo crecí, conocí a una Daniela que estaba escondida, y que tenía miedo de salir y demostrar lo que sentía. Descubrí que no soy tan fría como parezco y que puedo ser más cariñosa y preocupada. Gracias por tus abrazos cálidos, por tus apapachos, por tus besos, por tu preocupación, por estar ahí cada vez que lo necesitaba, por escucharme, por hacerme reír con tus payasadas, por ser tan sinceros el uno con el otro hasta el punto de irnos en la más profunda de todas, por ayudarme a ser más mujer.

Contigo conocí el amor, en un principio era lo máximo, era tan feliz, todo te causa felicidad, pero cuando vez que las cosas no son como uno quiere llega un punto en que se torna doloroso, uno se aferra tanto a la persona porque simplemente te alegra la vida, te hace feliz. Pero luego abres los ojos, sales de la burbuja en la que estas inmerso y te das cuenta que nuestra historia se está acabando, y que de una forma u otra, esa persona especial ya cumplio una etapa en tu vida, y que cada cual debe seguir su camino, esa es la etapa más difícil y dolorosa, resignarse y aceptar que las cosas llegaron a su fin. Han pasado tres meses de nuestro término definitivo y recién ayer tome la decisión de alejarme de tu vida, porque sin quererlo ni pensarlo aún tengo sentimientos contigo y seguir en contacto permanente sólo hace que se prolongue esa tristeza y que permanezca esa mínima esperanza. Asi es el amor.




La vida sigue... y aunque te sigo extrañando.. sé que Dios por algo hace las cosas.

Finalmente TODO PASA

2 comentarios:

Unknown dijo...

Hola, amiga!!!
hay emociones que pueden estar abiertas por años, pero ha de llegar la hora de definirlos y cerrar el ciclo para q se puedan ir abriendo otros..

Un Besoteeeee

M dijo...

Me identifico mucho con lo escribes, ademas me gusta mucho como lo haces.
Y por eso me quedo aqui! un beso:)