Mi círculo familiar se había convertido en una nube tóxica llena de cucarachas alrededor, que no hacían más que tirar las peores vibras, y que sin lugar a dudas me iban absorbiendo. No acepte más abusos hacía mis papás y mis hermanos, y empece a decir lo que pienso sin importar las consecuencias, y desde ese momento hay más respeto hacía ellos, si bien querían llevar la fiesta en paz y por eso preferían callar, yo no me contuve y les hice ver que estoy ahí incondicionalmente y que nadie les va a seguir haciendo daño mientras yo viva.
Diego, tú eras mi segundo problema, me había dado cuenta que te amaba, que eres una de las personas más importantes de mi vida y yo con mis inseguridades quería retenerte a toda costa, sin importar nada, así que decidí dejarte, liberarte de una buena vez. Han pasado tres meses desde aquel entonces, y tú nuevamente vuelves a mí, y me haces saber que soy una bendición en tu vida y que te diste cuenta que me quieres de verdad, pero que ahora tú necesitas ese tiempo que yo tuve para que te reencuentres contigo, porque no hiciste las cosas bien y que luego entendere el porque de tu decisión. Que sea lo que Dios quiera.
Y con respecto a mi tesis, con los problemas anteriores habían generado que la dejará tirada, no me importaba nada, así que respire hondo y volvi a empezar. Estoy a días de entregarla, gracias a Dios.
Sin dudas, llega un punto en que tratas de dominar las cosas a tu favor, de acuerdo a lo que UNO quiere, olvidandonos que el que finalmente decide es el de arriba.... y que todo pasa por algo en la vida.
Gracias Señor, por limpiar mi corazón y hacerme sonreír nuevamente.